Son entidades empresariales cuyo fin último no es obtener beneficios sino favorecer la integración laboral de personas en situación de exclusión.
Estas entidades contratan a personas que tienen dificultades para incorporarse al mercado laboral ordinario, y, durante el tiempo que están trabajando, reciben formación, apoyo en la mejora de habilidades, competencias y actitudes. Con la mayor parte de los colectivos, en el final de su proceso reciben orientación para acceder al mercado laboral normalizado, una vez han mejorado su nivel de empleabilidad.
Pueden ser de diferente naturaleza jurídica, tales como SL, SLU, Fundación, Cooperativa, …; a la vez que se registran, dependiendo del colectivo que atienden, como Empresas de Inserción, Centros Especiales de Empleo, entre otras formas, lo que les permite acceder a algunos beneficios fiscales para ayudar a su sostenibilidad.
Algunas de las iniciativas han nacido de talleres formativos que en su parte práctica generan productos y servicios, otras de la necesidad de la Cáritas Diocesana de gestionar la recogida de ropa; otras, de unir la venta de productos de comercio justo con ofrecer puesto de trabajo en inserción…
Todas ellas apuestan por un nuevo modelo de Economía que genere un mercado laboral más inclusivo y justo.
Pincha en la siguiente imagen y puedes conocer a las Entidades de la Economía Social, a través del Mapa de las Entidades de la Economía Social de Cáritas